El peeling consiste en la eliminación de una parte de la epidermis o dermis para conseguir una regeneración posterior de los tejidos. Esta técnica elimina manchas cutáneas, pequeñas arrugas y aporta la luminosidad de la piel que se ha ido perdiendo por la acción del sol, la fatiga, el estrés o por el proceso natural de envejecimiento. En general el peeling mejora la calidad de la piel y aumenta la producción de colágeno y elastina, componentes esenciales para mantener la piel suave y firme.
Es un tratamiento indicado para aquellas pieles que tanto por su aspecto como por su color y textura sufren signos claros de envejecimiento.
También está indicado en manchas pigmentadas o seniles, arrugas finas, poros dilatados, pequeñas cicatrices o secuelas de acné. Se puede tratar la cara, cuello, escote, manos y en general cualquier zona corporal.
En la mayor parte de los casos es necesaria una adecuada preparación de la piel antes de la primera sesión mediante cremas específicas o tratamientos de estética especializados, para poder establecer una buena hidratación, reparación y protección solar. En Arcos Centro Médico Integral le recomendaremos el más adecuado para su piel.
El tratamiento consiste en la aplicación de un producto químico sobre la piel que por su acción produce un peeling o peladura cutánea. Su efecto y profundidad depende de la composición y de la concentración del producto o productos utilizados, de la forma de aplicación, del tiempo de contacto con la superficie cutánea, de la zona tratada y del tipo de piel. La peladura puede ser desde una descamación imperceptible hasta un recambio epidérmico completo.
Son diversos los productos que pueden utilizarse: fenol, ácido tricloroacético, ácido salicílico, ácido glicólico, ácido láctico, ácido kójico, resorcina, etc. Pueden utilizarse de forma aislada o asociada y su elección depende del objetivo del tratamiento. La recuperación de la piel dependerá del peeling realizado.
Habitualmente se realizan varias sesiones, más o menos espaciadas en el tiempo. Su periodicidad irá tanto en función del objetivo como del agente que se haya utilizado durante el tratamiento.
Cada sesión puede durar entre 30 y 60 minutos. Se trata en todos los casos de tratamientos ambulatorios.
Al finalizar el tratamiento se establecen las pautas de mantenimiento y los cuidados de limpieza, hidratación, nutrición y protección.
El restablecimiento cutáneo depende del producto elegido, de la forma de utilización y del tipo de lesión tratada e irá desde sólo unas horas a varios días, no sobrepasando los 4 ó 5 días hasta la incorporación a sus actividades sociolaborales habituales.
Con el peeling se consigue desde una simple exfoliación hasta una renovación cutánea global, con atenuación o desaparición de lesiones y defectos cutáneos, recuperación del color de la piel y mejora de la textura cutánea en general.
En muchos casos es necesario complementar el tratamiento con otros tratamientos faciales: mesoterapia, implantes de relleno, tensores faciales o cirugía estética. En Arcos Centro Médico Integral valoraremos su caso y le indicaremos el más adecuado para usted.
La profesionalidad es el pilar fundamental de cada servicio que ofrecemos. Nuestro equipo altamente capacitado y comprometido trabaja incansablemente para garantizar que cada cliente reciba un tratamiento de la más alta calidad.
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